30 DE MAYO DIA DE CANARIAS ( INFANTIL )
Páginas
- PAGINA CENTRAL
- LOS ILLUMINATIS
- LOS INCAS
- TIERRA - AGUA - AIRE - FUEGO
- MAESTRO DE CEREMONIAS
- ARAMEO
- LOS CABALLEROS DE LA CRISTIANDAD
- EL TEMPLO DE JERUSALEM
- 13 FAMILIAS - MASONERIA
- CHAMANES
- LOS HOMBRES DEL VELO AZUL - TUAREG
- SANTIGUADOS CANARIOS -REZADOS
- SIMBOLOS
- TEMPLOS DE CANARIAS
- ESTATUTOS DE LOS CANTEROS DE BOLONIA (1248)
viernes, 29 de mayo de 2015
La isla de San Borondón
La isla de San Borondón
La isla de San Borondón es una leyenda popular de las Islas Canarias (España) sobre una isla que aparece y desaparece desde hace varios siglos, con origen en el periplo legendario de San Brandán de Clonfert («San Borondón»). Este mito tiene origen en los autores de la Grecia clásica, y se conoce en Europa como «isla de San Brandán» desde su plasmación por los cartógrafos medievales, pero en Canarias la tradición fue adoptada con entusiasmo, y adaptada, hasta en el nombre, a la idiosincrasia nacional propia Debido a sus características y comportamientos extraños, como el aparecer y desaparecer o esconderse tras una espesa capa de niebla o nubes, ha sido llamada «la Inaccesible», «la Non Trubada», «la Encubierta», «la Perdida», «la Encantada» y algún apelativo más.
El Tratado de Alcaçovas, suscrito entre España y Portugal en 1479 para repartirse territorialmente el Atlántico aún por navegar, especificaba claramente que San Borondón («aún por ganar») pertenecía al Archipiélago Canario. La bahía de Samborombón (Provincia de Buenos Aires, Argentina) fue nombrada de tal modo durante la expedición de Magallanes en marzo de 1520, en la creencia de que había sido formada por el desprendimiento de la isla de San Borondón del continente americano.
VIDEO LEYENDA DE SAN BORONDON
LEYENDAS CANARIAS - SAN BORONDÓN
Leonardo Torriani, ingeniero encargado por Felipe II para fortificar las Islas Canarias a finales del siglo XVI, describe sus dimensiones y localización y aporta como prueba de su existencia las arribadas fortuitas de algunos marinos a lo largo de ese siglo.
Esta isla se localizaríaal oeste del archipiélago, a 550 km en dirección oeste-noroeste de El Hierro y a 220 km en dirección oeste-sudoeste de La Palma, aunque según otros «testigos» que dicen haberla visto, se sitúa directamente entre las islas de La Palma, La Gomera y El Hierro.
San Borondón mediría 480 km de largo (de norte a sur) y 155 km de ancho (de este a oeste), formando hacia el medio una considerable degollada o concavidad y elevándose por los lados en dos montañas muy eminentes, siendo la mayor de las cuales la de la parte septentrional.
VIDEO MUSICAL
La Leyenda de San Borondon. Los sabandeños
martes, 26 de mayo de 2015
EN EL 2004 EL CONSISTORIO DE LAS PALMAS DE G.C. DERRIBA UN TEMPLO MASONICO EN LAS ALCARAVANERAS
EN EL AÑO 2004 EL CONSISTORIO DE LAS PALMAS DE GRAN CANARIA DERRIBA ÚN ANTIGUO TEMPLO MASONICO
El Ayuntamiento de Las Palmas a permitido derribar el antiguo templo de la
masonería de Las Alcaravaneras, situado en la calle León y Castillo, a pesar del
valor histórico del edificio.
El templo albergó la logia Acacia número cuatro en los años de la segunda república y fue el escenario donde se formaron personajes relevantes de la historia de Las Palmas de Gran Canaria como el que fuera alcalde, Juan Rodríguez Doreste, y Justo Alfonso Carrillo.
El templo albergó la logia Acacia número cuatro en los años de la segunda república y fue el escenario donde se formaron personajes relevantes de la historia de Las Palmas de Gran Canaria como el que fuera alcalde, Juan Rodríguez Doreste, y Justo Alfonso Carrillo.
El edificio constituía el ultimo vestigio masónico en Gran Canaria. El inmueble, fue construido en 1934, requisado tras la Guerra Civil por el movimiento falangista y, posteriormente, una vez sacado a subasta pública, pasó a manos de particulares en virtud de la aplicación de la ley franquista de Represión de la Masonería y del Comunismo.
miércoles, 20 de mayo de 2015
21 DE MAYO DE 822 Alhakén I
21 DE MAYO DE 822
Al fallecer hoy en el Emirato de Córdoba (España) el emir Alhakén I, le sucede su hijo Abderramán II que reinará hasta su muerte en 852, y es gran amante de la cultura. Durante su reinado, además de guerrear, fomentará las ciencias, las artes, la agricultura, la industria y atraerá a su ciudad los más ilustres sabios de la época. Se dedicará a embellecer su capital, hasta convertirla en un centro de las artes y las ciencias en Europa Occidental.
Al-Hakam I fue de color trigueño, alto y delgado, de nariz bien formada, aunque ligeramente respingona y no se teñía el pelo. Se preocupaba personalmente de todos los asuntos, fueran importantes o no; no se fiaba de nadie, aunque fueran hombres de confianza y no admitía que éstos cometieran actos injustos, pero en caso de que esto ocurriera, rápidamente reparaba la injusticia; era valiente, atrevido y temible en sus enfados; resuelto y decidido, pero también era espléndido en sus regalos y muy generoso. Era además buen orador e inspirado poeta. Allanó el camino a sus sucesores y se atrajo a los alfaquíes y hombres de saber.
Alhakén I
Abū al-‘Āṣ al-Hakam b. Hišām (en árabe: أبو العاص الحكم بن هشام), llamado al-Murtazî (المرتضى), más conocido como Alhakén I, Al-Hakam I o Alhaquén I (Córdoba, 770 - ibídem, 21 de mayo de 822), fue el tercer emir independiente de Córdoba, desde el 17 de abril de 796 hasta su muerte.
Para el cronista Ibn Hazm, fue el más sanguinario y déspota de los emires omeyas.
Hijo de Hisham I, lo sucedió a los 26 años de edad. Su reinado fue uno de los más agitados de la dinastía omeya, pues tuvo que hacer frente a las aspiraciones de sus tíos Sulaimán y Abd Allah (Abdalá). El más activo fue Abd Allah quien, desde la región valenciana donde había desembarcado, intentó atraer a su causa a los jefes árabes del valle del Ebro e incluso vino a pedir ayuda a la corte de Carlomagno en el año 797, contra su sobrino. En el 802 o 803, Abd Allah terminó estableciendo contactos con su sobrino, al-Hakam, que le autorizó a residir en Valencia, a cambio de una pensión anual. Su hermano Sulayman, siempre desde la costa oriental donde se había instalado a su vez en el año 798, intentó atacar Córdoba pero fue vencido y asesinado en el 800 o el 801.[1]
Asimismo tuvo que enfrentarse a las sublevaciones de los muladíes de Toledo, Mérida y Córdoba, brutalmente sofocadas. Su política de mano dura y el incremento de la aplastante presión fiscal sobre los cristianos provocaron el levantamiento de los cordobeses del Arrabal de Córdoba. Los amotinados estuvieron a punto de asaltar el Alcázar, pero una maniobra hábil y rápida de la guardia palatina salvó la situación. Tres días duró la matanza y saqueo en el Arrabal y el enérgico emir ordenó la crucifixión de trescientos notables. Todos los habitantes del Arrabal, que fue arrasado, fueron deportados.
Unas veinte mil familias emigraron de la Península y parte de ellas se establecieron en el norte de África, donde fundaron el barrio y mezquita de los andalusíes en la ciudad de Fez, mientras que otras se dedicaron algún tiempo a la piratería, desembarcando en Sicilia, ocupando Alejandría durante diez años y estableciéndose finalmente en la isla de Creta, donde fundaron el Emirato de Creta, bajo dinastía cordobesa, que se mantuvo independiente hasta el año 961, en que la isla fue reconquistada por el Imperio bizantino.
La situación interna permitió la conquista franca de Barcelona en el año 801 y, aunque por poco tiempo, los asturianos llegaron a ocupar Lisboa. Carlomagno firmó un tratado de paz con al-Hakam por el que se comprometía a no extender sus fronteras más allá del río Llobregat.
Su ejército fue fortalecido por un elevado número de bereberes, también reclutó mercenarios cristianos de diversas procedencias. Contó con una guardia palatina de más de dos mil hombres de origen eslavo, denominados «los mudos», porque no sabían el árabe ni el romance. Estuvieron en dos cuarteles contiguos al Alcázar y bajo las órdenes del conde cristiano Rabí, hijo de Teodulfo.
Dejó al morir, a los 52 ó 53 años, diecinueve hijos varones y veintiún mujeres. Le sucedió su hijo Abderramán II.
Para el cronista Ibn Hazm, fue el más sanguinario y déspota de los emires omeyas.
Hijo de Hisham I, lo sucedió a los 26 años de edad. Su reinado fue uno de los más agitados de la dinastía omeya, pues tuvo que hacer frente a las aspiraciones de sus tíos Sulaimán y Abd Allah (Abdalá). El más activo fue Abd Allah quien, desde la región valenciana donde había desembarcado, intentó atraer a su causa a los jefes árabes del valle del Ebro e incluso vino a pedir ayuda a la corte de Carlomagno en el año 797, contra su sobrino. En el 802 o 803, Abd Allah terminó estableciendo contactos con su sobrino, al-Hakam, que le autorizó a residir en Valencia, a cambio de una pensión anual. Su hermano Sulayman, siempre desde la costa oriental donde se había instalado a su vez en el año 798, intentó atacar Córdoba pero fue vencido y asesinado en el 800 o el 801.[1]
Asimismo tuvo que enfrentarse a las sublevaciones de los muladíes de Toledo, Mérida y Córdoba, brutalmente sofocadas. Su política de mano dura y el incremento de la aplastante presión fiscal sobre los cristianos provocaron el levantamiento de los cordobeses del Arrabal de Córdoba. Los amotinados estuvieron a punto de asaltar el Alcázar, pero una maniobra hábil y rápida de la guardia palatina salvó la situación. Tres días duró la matanza y saqueo en el Arrabal y el enérgico emir ordenó la crucifixión de trescientos notables. Todos los habitantes del Arrabal, que fue arrasado, fueron deportados.
Unas veinte mil familias emigraron de la Península y parte de ellas se establecieron en el norte de África, donde fundaron el barrio y mezquita de los andalusíes en la ciudad de Fez, mientras que otras se dedicaron algún tiempo a la piratería, desembarcando en Sicilia, ocupando Alejandría durante diez años y estableciéndose finalmente en la isla de Creta, donde fundaron el Emirato de Creta, bajo dinastía cordobesa, que se mantuvo independiente hasta el año 961, en que la isla fue reconquistada por el Imperio bizantino.
La situación interna permitió la conquista franca de Barcelona en el año 801 y, aunque por poco tiempo, los asturianos llegaron a ocupar Lisboa. Carlomagno firmó un tratado de paz con al-Hakam por el que se comprometía a no extender sus fronteras más allá del río Llobregat.
Su ejército fue fortalecido por un elevado número de bereberes, también reclutó mercenarios cristianos de diversas procedencias. Contó con una guardia palatina de más de dos mil hombres de origen eslavo, denominados «los mudos», porque no sabían el árabe ni el romance. Estuvieron en dos cuarteles contiguos al Alcázar y bajo las órdenes del conde cristiano Rabí, hijo de Teodulfo.
Dejó al morir, a los 52 ó 53 años, diecinueve hijos varones y veintiún mujeres. Le sucedió su hijo Abderramán II.
lunes, 18 de mayo de 2015
LA ROSETTA ........NAPOLEON BONAPARTE
19 DE MAYO DE 1798
En el puerto de Tolón, Francia, Napoleón Bonaparte embarca con 38.000 soldados y 16.000 marinos a bordo de 320 navíos para combatir a Inglaterra en Egipto y eliminar así su presencia en el Mediterráneo. La campaña militar será desastrosa y el 23 de agosto del año siguiente, Napoleón decidirá abandonar ese país junto con la mayoría de sus oficiales y parte de los científicos.
A pesar de la retirada, la campaña científica resultará mucho más productiva, de hecho, se considera que con esta expedición militar a Egipto, dará comienzo la nueva y fascinante "ciencia" de la egiptología en la que el descifrado de los jeroglíficos en 1822, gracias a Champollion, tendrá mucho que ver con el hallazgo en Rosetta de una estela.
sábado, 16 de mayo de 2015
TEMPLARIOS
TEMPLARIOS
Antes de comenzar con los personajes, debemos hacer una diferenciación entre cruzados y templarios. Los cruzados, son aquellos caballeros (generalmente nobles y reyes) que emprendieron la 'guerra santa' contra los infieles, tanto los musulmanes en Tierra Santa, como otras religiones no cristianas en distintos puntos geográficos (por ejemplo Hungría). La finalidad no era solo extender el cristianismo, sino recuperar territorios que el Pontificado perdía políticamente. El cruzado tomaba la cruz en su país de origen y, tras reunir dinero y tropas, marchaba a la cruzada a guerrear. Cuando la batalla se hacía insostenible o se daba por terminada, el cruzado volvía a su casa hasta la próxima.
Los templarios por su parte, nacieron como una orden vinculada a la cruzada pero diferente a ella: los Pobres Caballeros de Cristo. Eran monjes guerreros cuya misión era proteger al peregrino y al cruzado y crearles seguridad en Tierra Santa. Estos templarios hicieron voto de castidad, pobreza y obediencia. Eran guiados por un Gran Maestre del Temple. Poco a poco y desde que la Iglesia los reconoce como Orden cristiana, el Temple gana adeptos y donaciones y se convierte en un poder internacional, una institución no solo militar sino también económica. Este poder llevará a diferentes monarcas europeos a sentirse incómodos con la Orden del Temple, que la veían como una competencia, un enemigo político muy poderoso.
En definitiva, todos los templarios eran cruzados, pero no todos los cruzados eran templarios, pues solo si te hacías monje y pasabas a vivir en Tierra Santa, podías acceder al Temple.
Los caballeros cruzados
*Ricardo I de Inglaterra:
Nace en Oxford el 8 de septiembre de 1157. Sus padres, Enrique II de Inglaterra y Leonor de Aquitania, vivían una relación tormentosa que acabaría separándolos en trato y espacio. Leonor marcha a Aquitania y Ricardo, se irá con ella, siendo nombrado Duque de Aquitania en 1168 y Conde de Poitiers en 1172.
El físico de Ricardo era muy destacable, de cabellos rubios rojizos, ojos claros, alto, con fuertes piernas y piel blancuzca, lo definen las crónicas. Debemos tomar esta definición con cautela, pues es una figura que se debatirá siempre entre el mito y la historicidad. Lo que está claro es que la educación que le dio su madre fue completa, aunque no terminó de aprender nunca la lengua inglesa, manejaba el francés y el occitano perfectamente y escribía poesía en ambas lenguas. Esta educación no limó su carácter: aunque era caliente y caballeroso, dicen de él que tenía algunos “defectos” muy humano. Era un poco avaricioso y egoísta; bastante violento y altanero y tenía poco sentido de la responsabilidad. En cambio, era un estratega y un militar modelo, con una gran energía y buenas dotes de mando. Su forma de ver las cosas le llevó en innumerables ocasiones a retar, como hacían también sus hermanos, a su propio padre, Enrique II.
En 1161, su hermano mayor, Enrique el Joven es adjuntado al trono de Inglaterra como regente y Conde de Anjou. Unos años después, en 1173, Enrique, Ricardo y Godofredo (el hermano pequeño), planean una sublevación contra su padre para imponer en el trono a Enrique el Joven. Enrique II, enterado del plan invade Aquitania y, teniendo como eje del plan a Leonor de Aquitania, la encierra para evitar posibles peligros futuros, permaneciendo bajo arresto hasta 1189. En 1174, aplastada la rebelión y rendidos los rebeldes, Ricardo jura lealtad a su padre, quien le perdona.
En Aquitania comienzan a sucederse revueltas internas, encabezadas por los barones de las tierras, contra el déspota del Duque Ricardo. Ricardo se enfrentará con arrojo sobre las rebeliones, las cuales aplastará con gran crueldad, arrasando tierras, matando soldados e incluso, saqueando casas y violando mujeres (datos muy difíciles de comprobar, pues son escritos por cronistas de la época). Entre 1181 y 1182 el condado de Angulema está debatiéndose en el problema de quién será el sucesor, lo que aprovecha Ricardo para adentrarse en Angulema y extenderse más allá, hasta Limousin y Perigord. Un año después, Enrique II le exige el pago del homenaje, un tributo que ofrecían los caballeros a su rey, en su condición de vasallos. Pero Ricardo se negará a pagarle, lo que desencadenó la invasión del rey de Inglaterra en Aquitania.
Enrique el Joven no vivirá lo suficiente para suceder a su padre y, a su muerte, Ricardo pasaba a ser el heredero del trono inglés, junto con los títulos franceses por parte de su madre. En 1187, aprovechando la situación de superioridad que se le presentaba si accedía al trono, sella una alianza con Felipe II de Francia, quien apoyará su posición a cambio de Normandía y Anjou. Además y recogiendo eco de las noticias que llegaban de Tierra Santa, decide tomar la Cruz en Tours, convirtiéndose así en caballero cruzado, como también lo era su aliado. Felipe II y Ricardo iniciarán una revuelta contra Enrique II, a quien derrotan en la batalla de Ballans. Ese mismo año, Enrique II muere en Chinon, Francia, y Ricardo es nombrado Rey de Inglaterra, Duque de Normandía y Conde de Anjou, manteniendo el Ducado de Aquitania y el Condado de Poitiers.
Varios hechos caracterizan su reinado. El primer fue la brevedad con la que permaneció en terreno inglés, pues en todo su reinado a penas estuvo seis meses. No habló inglés y no gustaba del clima de Londres, con lo cual evitaba por todos los medios residir allí. Además se sentía plenamente francés, su madre lo había educado en costumbres y formas francesas, las cuales él tenía como patrón de todo. Quizá esta sea la característica más anecdótica de su reinado, pues otras le retratan dentro de esas formas que le han hecho pasar a la historia como modelo de caballero militar de la Edad Media:
- No podemos obviar el desprecio que se hizo a la comunidad judía con el acceso al trono de Ricardo. Durante su coronación, tanto las mujeres como los judíos tuvieron prohibida la entrada, con el argumento de que en la investidura también recibía los símbolos de cruzado.
Algunos judíos importantes londinenses, decidieron llevarle algunos presentes como celebración de su nombramiento. Los soldados de Ricardo los retuvieron, los desnudaron, los azotaron y los echaron de allí, junto con los regalos. La idea de que el rey no quería a los judíos en Londres hace correr como la pólvora un sentimiento antisemita que les lleva a maltratar, torturar y asesinar a los judíos londinenses, quienes ven arrasadas sus posesiones y quemadas sus casas. La revuelta se descontroló y el ejército tuvo que intervenir. Algunos violentos había confundido casas y quemado las de cristianos de a bien, así que tuvieron que pagar el descuido con el escarnio público y la muerte. Los judíos habían sido masacrados y entre sus víctimas se contaba uno de los personajes más influyentes del Reino, Jacobo de Orleans. El reino se desestabiliza y Ricardo no tiene otro remedio que dictar órdenes y escritos de paz con los judíos. Pero poco duraron pues un año después otra masacre similar se llevaría acabo en York.
- La cruzada fue otro acontecimiento importante llevado a cabo durante el reinado de Ricardo I. Jerusalén acababa de caer en manos de Saladino y se inician los preparativos que ponen en marcha la Tercera Cruzada. Para conseguir la cantidad ingente de dinero que necesitaba un país para mover a los ejércitos hacia una guerra lejos de su tierra, Ricardo I subió los impuestos, propuso a Guillermo I de Escocia librarle de su vasallaje por 10.000 marcos, vendió posiciones oficiales, tierras y derechos, y, aquellos que tenían su puesto (abades, nobles) tuvieron que pagar una cantidad bastante elevada para ratificarlo y mantenerlo.
Antes de abandonar Inglaterra decide dejar su territorio bien resguardado a manos de senescales de confianza que quedaron como “gobernadores provisionales” en Anjou, Normandía, Poitou y Gascuña. En Inglaterra quedan como regentes el obispo de Durham, Hugo; Guillermo de Longchamp y su madre Leonor de Aquitania. Ricardo se marcha a la Cruzada y Juan sin tierra, aprovecha la situación de desconcierto y nueva organización para comenzar con las intrigas para quedarse con el poder.
De camino a Tierra Santa, en 1191, parará en Chipre y aprovecha la estancia para conquistarla, arrebatándosela al déspota Isaac Comneno, gobernador de la isla. Ese mismo año, hace llamar a su futura esposa, Berenguela de Navarra, a Chipre donde contraerán matrimonio. Juntos navegaron hacia Tierra Santa.
El primer sitio en el que desembarcan es Acre. Ricardo no estará solo pues tiene consigo a Felipe II de Francia como aliado (con quien había decidido partir a la vez para que no hubiera problemas en Francia de conquista de tierras en ausencia del otro rey) y Leopoldo V de Austria, en calidad de aliado vasallo, es decir que no estaban en igualdad de condiciones. La conquista de Acre fue dura, no solo por la fuerza del ejército, sino también porque Ricardo sufría escorbuto. Una vez conquistada Acre, Felipe II y Ricardo I colgaron los pabellones inglés y francés bien alto, mientras que Leopoldo V hacía lo propio con el suyo. Sin embargo, al no tener la misma calidad de aliado que Felipe y Ricardo, estos se sintieron insultados y mandaron arrancar los pendones austriacos y arrojarlos a un foso. Leopoldo V, muy ofendido, abandonó la cruzada.
El mismo camino siguió Felipe II, quien después de discutir con Ricardo por la posesión de Jerusalén y la repartición de Chipre, decidió volverse a Francia y abandonar al rey inglés en su empresa. Quedaba solo Ricardo I, con sus ejércitos y 2.700 prisioneros musulmanes que le retrasaban en su camino hacia el sur. Para evitar este retraso, decidió deshacerse de los prisioneros, mandándoles ejecutar. En el sur, conseguirá otra victoria sobre Saladino, refortificando Ascalón en 1192, que se convierte en el bastión cristiano más importante en Tierra Santa. Mientras, en Jerusalén se elige a Conrado de Montferrat, primo de Leopoldo V, como gobernador de Jerusalén, casándose enseguida con la princesa Isabel de Jerusalén. Ricardo acepta al nuevo gobernador de mala gana. Poco después, Conrado es asesinado y ocupa su puesto Enrique II de Champaña, quien se casa con la viuda embarazada Isabel para justificar su nueva posición. El nuevo mando era más agradable a Ricardo I, aunque nunca se sabrá si estuvo relacionado con la muerte de Conrado o no.
Ante la pérdida de apoyo y el desgaste militar y económico que sufrían ambos bandos, se intenta pactar una tregua entre Saladino y Ricardo. Ricardo intenta una última incursión desesperada en Egipto, pero es derrotado por las tropas musulmanas. La tregua, que se firmaba para tres años, llega a buen término el dos de septiembre de 1192 con la condición de que Ascalón fuera destruida, se permitiera el libre acceso a los cristianos y hubiera mutua tolerancia entre las religiones.
El regreso de a Inglaterra de Ricardo fue tortuoso. Primero hubo de atracar en Corfú y desde allí navegar de incógnito hasta Aquilea, donde tomaría el camino por tierra hasta Aquitania, pasando por Europa Central. Leopoldo V lo captura cuando Ricardo se encontraba cerca de Viena y lo acusa de asesinar a su primo Conrado. Ricardo fue descubierto, aunque iba de incógnito, por su hábito a comer pollo asado, un manjar que solían disfrutar las altas capas de la sociedad. Leopoldo V lo envía a Alemania, bajo el mandato de Enrique IV, quien lo mantiene encerrado en Dürnstein. Desde allí se pide cómo rescate 100.000 marcos a su madre Leonor. Había sentimientos encontrados entre distintos personajes implicados en la trama: Felipe II de Francia apoyaba a Juan como candidato al trono, porque lo creía menos peligroso que su hermano Ricardo; el Papa Celestino III no gustaba en absoluto de Juan y prefería a Ricardo; Leonor de Aquitania quería que su hijo Ricardo volviera y removió Roma con Santiago para conseguir el dinero. Felipe II y Juan ofrecían 80.000 marcos por mantener a Ricardo retenido, pero finalmente el dinero que recaudó Leonor fue mandado por embajadores “bajo responsabilidad del rey” (es decir que si se perdía por el camino, el responsable era Ricardo) y permitió su libertad en 1194. Felipe II enviará inmediatamente una carta a Juan en la que le advierte “cuídate, el demonio anda suelto”.
A su regreso a Aquitania, Ricardo recupera el trono inglés sin complicación y concede el perdón a su hermano Juan. Pero a Felipe II le declarará abiertamente su hostilidad, aliándose con Balduino IX de Flandes, el Conde de Boloña y Sancho VI de Navarra para iniciar una guerra contra el rey francés. Algunas batallas fueron ganadas, como la famosa batalla de Gisors, en la que Ricardo I acuñaría como lema la frase: Dios y mi derecho, haciendo referencia a su posición social como Rey. Esta frase ya la había usado durante su encarcelamiento en Alemania como justificación de su condición de monarca. La monarquía inglesa adoptará la frase a partir de este momento hasta hoy día.
Mientras Ricardo se encuentra en plena batalla con Felipe II, el vizconde Aimar V, nada satisfecho con las gestiones de Ricardo I inicia una revuelta en Lemousin en 1199. Ricardo acude a sofocarla, actuando sobre el vizconde en Cuaresma y, relatan las crónicas, devastando “la tierra del vizconde con fuego y espada”. Asediará el castillo Chalus-Chambrol, donde habitaba el vizconde y se apropiará de él. Revisando la fortificación, las murallas del castillo y las prácticas de los arqueros, sin su uniforme militar, Ricardo I recibirá un disparo de una flecha en un hombro que lo enviará directamente a su tienda. Allí, un cirujano intentó extraerle la flecha, pero con tan poca habilidad que, cuentan las crónicas, le destrozó el brazo. La herida se le engangrenará y será la causa de su muerte. Antes de morir capturarán al responsable del flechazo al rey y lo pondrán frente a él para que dictamine su castigo. Ricardo I, lo observó y vio que solo era un niño (el cual quiso vengar a su padre que había sido muerto por el rey) y le perdonó la vida: “Continúa viviendo y por mi recompensa contempla la luz del día”. Le entregaría 100 marcos antes de dejarle marchar. Sin embargo, la humanidad del rey se vio contradicha, pues su capitán Mercadier, atraparía al muchacho, lo despellejaría y lo colgaría para escarnio público.
Ricardo I de Inglaterra lega todos sus territorios a su hermano Juan y, sus joyas, a su sobrino Otón IV de Alemania, a quien se encargó de ayudarle a conseguir el trono alemán años antes. El seis de abril de 1199, Ricardo muere y los cronistas recuerdan la situación del monarca como: “el León que fue asesinado por la hormiga”. Su cuerpo será dividido: las vísceras se entierra en Lemousin, el corazón en Normandía y el cuerpo en la Abadía de Fontervrault en Anjou.
Poco o nada hemos referido sobre su vida personal que os resumo de la siguiente manera: en 1191 se casa con Berenguela de Navarra en Limassol, Chipre. Él había estado prometido desde pequeño con Adela de Francia, pero finalmente no pudo casarse con ella, pues Enrique II, su padre, la hizo su concubina. Este fue uno de los motivos que harían a Ricardo sentir tanto odio por Enrique. Tras el matrimonio con Berenguela, esta viajará con Ricardo hasta Tierra Santa y, a su vuelta a Francia, viajarán por caminos separados. Berenguela partirá hacia Roma, después a Marsella y por último llegará por tierra a Aquitania. La pareja no tendrá hijos.
Los caballeros del Temple o Templarios
*Hugo de Payens:
Es el fundador de la Orden del Temple y su primer Gran Maestre. Debió naces sobre el 1070 y no se sabe muy bien si fue en Payns (Francia) o en Pedano (Italia). Se acepta Payns como su ciudad natal. Las primeras noticias que tenemos de él se deben a una carta diplomática junto con una donación que hará al Conde Hugo de Champagne, cuando Hugo de Payens tenía tan solo 16 años. Desde esa edad comienza a desarrollar una red diplomática con diferentes nobles franceses. Por ejemplo, el Conde Godofredo de Bouillon, con quien irá a la Primera Cruzada, bajo sus órdenes en 1096.
Se conoce que Hugo se casó con Elizabeth de Chappes, la cual pasará a las crónicas como Catalina de Saint Claire. Con ella tuvo un hijo: Thibaud, abad de La Colombe.
Su gran amigo el conde Hugo peregrinará en dos ocasiones a Tierra Santa, donde se encontrará con Hugo de Payens, con quien no perderá contacto por carta nunca. Entre 1104 y 1107, será su primera peregrinación; y entre 1114 y 1116, la segunda.
*Hugo de Payens:
Es el fundador de la Orden del Temple y su primer Gran Maestre. Debió naces sobre el 1070 y no se sabe muy bien si fue en Payns (Francia) o en Pedano (Italia). Se acepta Payns como su ciudad natal. Las primeras noticias que tenemos de él se deben a una carta diplomática junto con una donación que hará al Conde Hugo de Champagne, cuando Hugo de Payens tenía tan solo 16 años. Desde esa edad comienza a desarrollar una red diplomática con diferentes nobles franceses. Por ejemplo, el Conde Godofredo de Bouillon, con quien irá a la Primera Cruzada, bajo sus órdenes en 1096.
Se conoce que Hugo se casó con Elizabeth de Chappes, la cual pasará a las crónicas como Catalina de Saint Claire. Con ella tuvo un hijo: Thibaud, abad de La Colombe.
Su gran amigo el conde Hugo peregrinará en dos ocasiones a Tierra Santa, donde se encontrará con Hugo de Payens, con quien no perderá contacto por carta nunca. Entre 1104 y 1107, será su primera peregrinación; y entre 1114 y 1116, la segunda.
Cuando Godofredo de Bouillon muere, Hugo de Payens decide quedarse en Tierra Santa y fundar una orden que proteja a los peregrinos desamparados en medio de un territorio en guerra. En 1119, se entrevista con Balduino II (de origen francés, Rey de Jerusalén), junto con ocho caballeros más, para informarle de la creación de la nueva Orden, esperando el beneplácito del Rey. El Rey, no sólo les concede el permiso de la formación, sino que también les ofrece un sitio para organizarse y habitar: el antiguo Templo del Rey Salomón (mezquita Al-Aqsa), de donde cogerán su apodo de ""templarios". Entre 1120 y 1125 Hugo escribirá una serie de cartas que mandará a Francia con nuevas noticias sobre la situación en las que ya firma como "magister militum Templi" (maestro militar del Temple). En 1125 el conde Hugo se les une como caballero templario.
Entre los otros caballeros fundacionales encontramos los nombres de Godofredo de Saint-Omer, Payen de Montdidier, Archambaud de Saint Agnan, André de Montbard, Godofredo Bison, Rossal y Gondamer. Falta un nombre que quizá corresponda al de Hugo de Champagne, pero del que no se tiene seguridad.
En 1128 decide legalizar la Orden de cara a la Iglesia, convocando un concilio en Troyes, en el que se reúnen nobleza e Iglesia con Hugo de Payens. En el concilio explica los estatutos de los Pobres Caballeros de Cristo para que los aprueben y presenta a la Orden como una milicia para proteger a los peregrinos en Tierra Santa. San Bernardo de Claraval, presente en el concilio, redacta durante la sesión la Regla del Temple, donde se define al templario como un monje soldado que debe estar dotado de sencillez, pobreza, castidad, obediencia y dedicarse a la oración. La Iglesia acoge a la Orden como propia y le da su bendición. Ese mismo año, muchos caballeros se unen a los templarios, aportando no solo personal sino también una cantidad de dinero y donaciones que los enriquece. Gracias a estas podrán construir la primera Casa de los Templarios en Londres y en Edimburgo y realizarán una serie de castillos-monasterios fortalezas en las zonas fronterizas problemáticas.
Hugo sería Gran Maestre durante 20 años, convirtiendo a la Orden en una institución internacional, tanto militar como financiera. Morirá en Palestina en 1136, sucediéndole como Maestre Roberto de Craon.
*Jacques de Molay:
Jacques Bernard de Molay nace entre 1240 y 1244 en Borgoña, Francia. Es el último Gran Maestre de la Orden del Temple. De familia noble, su padre era Señor de Lonvy, heredero de Mathe y Señor de Rahon.
Jacques decide unirse a la Orden de los Pobres Caballeros de Cristo en 1265 y se convierte en Gran Maestre en 1293 por méritos. Hasta 1304 realizó innumerables expediciones contra los musulmanes. En 1298 conquista Jerusalén. Un año después, derrota al Sultán de Egipto, Malej Nacer. Y en 1300 realiza la primera incursión contra Alejandría. Además, estuvo a punto de recuperar Siria, aunque no lo consiguió.
El poder de los Templarios, como se refirió anteriormente, fue creciendo hasta tal punto que su poder, su influencia y su economía superaba la de algunos monarcas europeos. Felipe IV de Francia fue el primero en sentirse molesto con la Orden, iniciando un programa de desgaste contra los templarios a partir de acusaciones de herejía y sacrilegio que le hizo hacer saber al Papa Clemente V. Éste, declara a la Orden herética y la desvincula de la Iglesia, siendo ahora perseguida por esta. En 1307 se impone una orden de detención a los templarios por sacrilegio contra la Santa Cruz, sodomía, herejía e idolatría a Baphomet (demonio encargado del purgatorio de los 7 infiernos y los demonios de los 7 pecados capitales). El contacto que los Templarios habían adquirido con los musulmanes en Tierra Santa y los siglos viviendo en dichas tierras, les hicieron aprender las costumbres y la lengua árabe e incluso llegar a tener una relación de respeto con los musulmanes, quienes pensaban que los templarios eran una "raza cristiana" diferente. La diplomacia era constante entre un bando y el otro y esto tampoco fue bien visto por parte del mundo cristiano, que interpretó a su antojo que los templarios se estaban islamizando y, por tanto, traicionando al cristianismo.
Un viernes 13 (de ahí la famosa tradición del día maldito) los templarios son perseguidos, capturados y sometidos a tortura para confesar sus pecados. En 1314 Jacques de Molay es quemado vivo en París, frente a Nôtre Dame. Si bien bajo tortura confesaron la herejía, siempre se consideraron inocentes. Recoge la leyenda unas palabras del último Gran Maestre, cuando se encontraba en la hoguera:
"Dios sabe quién se equivoca y ha pecado y la desgracia se abatirá pronto sobre aquellos que nos han condenado sin razón. Dios vengará nuestra muerte. Señor, sabed que, en verdad, todos aquellos que nos son contrarios, por nosotros van a sufrir." "Clemente, y tú también Felipe, traidores a la palabra dada, ¡os emplazo a los dos ante el Tribunal de Dios!... A ti, Clemente, antes de cuarenta días, y a ti, Felipe, dentro de este año..."
sábado, 9 de mayo de 2015
EL PADRE MARIO ( IMPOSICION DE MANOS )
EL PADRE MARIO
Giuseppe Mario Pantaleo, José Mario Pantaleo o Padre Mario (1915-1992) fue un sacerdote Italiano, nacido en Pistoia que vivió la mayor parte de su vida en Argentina. Mario Pantaleo fue bien conocido como sacerdote sanador y por su obra en favor de los pobres y desposeídos de González Catán, siendo popularmente conocido como Padre Mario. Era también Licenciado en Psicología y Filosofía.
José Mario Pantaleo era hijo del empresario Enrico Pantaleo y de Ida Melani. La mayor parte de la fortuna de la familia se perdió durante la Primera Guerra Mundial.
Los Pantaleo venden su casa a la Orden de Clarisas de Clausura y en febrero de 1927 Mario y su familia emigran a la Argentina y se establecen en la ciudad de Alta Gracia, provincia de Córdoba en donde el hermano de Enrico tenía negocios. El pequeño Mario es internado como pupilo en un instituto salesiano y cuando Enrico no logra tener éxito en sus emprendimientos comerciales retorna a Italia en 1931 con toda su familia excepto el pequeño Mario que fue dejado a cargo de los salesianos. Desde entonces no volvería a ver a sus padres ni a sus hermanos Andrés, Inés y Salvador.
Los hermanos salesianos al no recibir noticias de su familia se contactan con el consulado italiano, siendo su tía Rubina quien se hace cargo de él. Mario retorna a Italia por barco viajando solo.
Ni bien llega su tía lo interna en un seminario en Arezzo y más tarde fue trasladado al seminario de Viterbo y Salerno.
En esa época conoce al padre Pío de Pietrelcina el cual se convierte en su confesor y entre ellos nace una relación fraternal.
El 3 de diciembre de 1944 Pantaleo finaliza sus estudios en el seminario de Matera y el 8 del mismo mes da su primera misa también en Matera.
En 1946 sin destino fijo y teniendo en cuenta el pedido que el obispo Antonio Caggiano hiciera al papa por sacerdotes para Argentina, Pantaleo visita al padre Pío en busca de consejo. Padre Pío lo alentó diciéndole: "Ve, hijo mío, estás en tu camino... Tú también has sido elegido para una singular misión... Adiós, hijo, adiós".
Pantaleo regresa a Argentina el 4 de marzo de 1948 en donde pasó el resto de su vida.
Su primer destino fue la iglesia de San Pedro en Casilda, fue designado capellán del Hospital Provincial de Rosario y luego fue trasladado a Rufino.
Fue como capellán del hospital de Rosario que el padre Mario conoce a tres personas que serán muy importantes en su vida: Juan Lo Celso, director del hospital, el joven médico Escalante de Larrechea y Perla Garaveli, a la que curaría y que se convertiría en su principal ayudante y que hoy está a cargo de la obra del padre Mario.
En 1958 Padre Mario decide viajar a Buenos Aires para estudiar filosofía, una vieja pasión de toda la vida. Él escribió al obispo Caggiano pidiéndole ser transferido y luego que su transferencia fue aceptada fue puesto a cargo del Hospital Ferroviario. Fue en éste momento en el que Pantaleo comenzó a ser conocido como cura sanador, atendiendo a un número creciente de personas en su pequeño departamento de Floresta.
De tanto andar, en el padre Mario comienza a surgir la idea de adquirir un terreno en González Catán y afincarse allí, pero antes quería ser autorizado a dar misa en el lugar. La fama de cura sanador que se había ganado hizo que las autoridades eclesiásticas fuesen renuentes a darle una capilla en el lugar.
Durante nueve años, además de su trabajo en el Hospital Ferroviario y como sacerdote asistente de la Iglesia Nuestra Señora del Pilar, Mario Pantaleo dormía en un baño del subsuelo del Hospital Santojanni, donde había logrado ser asistente del capellán.
Ricos y pobres siguieron visitando al padre Mario para buscar sanación. Personajes como el historiador Félix Luna, el escritor Ernesto Sabato, la empresaria Amalia Fortabat, ex-presidentes como Carlos Menem y Arturo Frondizi, y el dictador Jorge Rafael Videla, entre muchos otros personajes famosos.
El padre Mario atribuia las milagrosas curas a Dios y él se definía sólo como la "guitarra" siendo Dios el "guitarrero".
En 1972 coloca la piedra fundamental de la Iglesia Cristo Caminante que se inaugura tres años más tarde, luego viene la construcción de la Guardería, el Jardín de Infantes, la Escuela Primaria y Secundaria, la Escuela para Discapacitados, el Polideportivo, el Centro de Atención a Mayores, la Panadería, el Centro de Capacitación Laboral, entre otros.
Su último milagro en vida fue hecho en el Hospital Ferroviario en donde pasó los últimos días de su vida. Acostado en su cama el padre Mario bendijo varias veces a su compañera de cuarto la jovencita estadounidense Amanda Salas de 16 años de edad, que estaba cuadripléjica y con respirador artificial. Un par de años después, en San Diego (California), Amanda pudo levantarse de su silla de ruedas.
El 19 de agosto de 1992, a pocos días de haber celebrado sus 77 años, muere en la Ciudad de Buenos Aires. Los días que dura su velatorio en su querido González Catán más de quince mil personas pasan doloridas frente a la capilla ardiente.
Los milagros del padre Pantaleo siguieron después de muerto. El caso más espectacular es del Sr. Mario Sancho que luego de un ACV quedó hemiplégico. El 19 de agosto de 2002 —al cumplirse los diez años del fallecimiento del padre Pantaleo— el Sr. Sancho salió de su hogar con la intención de suicidarse. Cuando se encontraba en la calle, un hombre regordete y bajito, al que luego reconocería como Pantaleo, sale a su encuentro y le toca el rostro y en ese mismo instante el Sr. Sancho comienza a caminar con toda normalidad
Te invitamos desde el Alma a ver esta película actuada brillantemente por Jorge Marrale y Graciela Borges, sobre parte de la VIDA Y OBRA DEL PADRE MARIO PANTALEO.
Disponete con tranquilidad a verla con atención, porque cada detalle de la misma es muy importante.
Y quizás quieras verla más de una vez, porque no es sólo un documental, nos levanta la Autoestima, el Animo, la Energía Vibracional, y nos ayuda a tener FE ABSOLUTA (o sea sin duda), y NOS FORTALECE LA CONVICCIÓN de que con la FE EN DIOS TODO SE PUEDE ALCANZAR.
Gracias Padre Mario por tu Luz y tu Amor hacia todos seres humanos.
Quiero resaltar que no pertenezco a la Fundación, pero quise poner esta película a disposición de todos, porque siempre la recomendé y lo seguiré haciendo, pero me dicen que no se consigue, bueno ahora aquí está a disposición de todos, para que sirva como un Impulso DE AMOR, PAZ INTERIOR Y FE ABSOLUTA EN DIOS.
Eternamente Gracias AL PADRE MARIO PANTALEO
Disponete con tranquilidad a verla con atención, porque cada detalle de la misma es muy importante.
Y quizás quieras verla más de una vez, porque no es sólo un documental, nos levanta la Autoestima, el Animo, la Energía Vibracional, y nos ayuda a tener FE ABSOLUTA (o sea sin duda), y NOS FORTALECE LA CONVICCIÓN de que con la FE EN DIOS TODO SE PUEDE ALCANZAR.
Gracias Padre Mario por tu Luz y tu Amor hacia todos seres humanos.
Quiero resaltar que no pertenezco a la Fundación, pero quise poner esta película a disposición de todos, porque siempre la recomendé y lo seguiré haciendo, pero me dicen que no se consigue, bueno ahora aquí está a disposición de todos, para que sirva como un Impulso DE AMOR, PAZ INTERIOR Y FE ABSOLUTA EN DIOS.
Eternamente Gracias AL PADRE MARIO PANTALEO
Padre Mario - Las Manos Película Completa de A. Doria
IVA ZANICCHI LA ORILLA BLANCA, LA ORILLA NEGRA
Suscribirse a:
Entradas (Atom)